Estimulación Neurosensorial
La base física del desarrollo humano radica en un correcto funcionamiento de nuestro Sistema Nervioso Central. Es necesario partir de la relación existente entre movimiento y aprendizaje para ayudar al niño a reorganizar su cerebro, generando una correcta actividad perceptiva que le permita desenvolverse y adaptarse correctamente a la demanda del ambiente.
Los seres humanos percibimos la información del mundo que nos rodea a través de los sentidos. Procesamos la información que vemos, oímos, tocamos o saboreamos de manera inmediata y sin darnos cuenta.
Los niños necesitan integrar toda esta información externa que les hace posible formar una idea funcional de la realidad y les capacita para desenvolverse positivamente en su entorno cotidiano.
La integración de los sistemas sensoriales en los niños es el resultado de la eficacia de los procesos de organización del sistema nervioso que comienza en el embarazo y se desarrolla paulatinamente en las etapas tempranas de la vida humana.
La eficacia del funcionamiento de los sistemas sensoriales depende del desarrollo de estructuras conectivas dentro del cerebro. El cuerpo calloso es la estructura cerebral, que hace posible el desarrollo óptimo de las conexiones interhemisféricos necesarias para el procesamiento neurosensorial.